Anoche se juntaron los tres
directores de orquesta y ofrecieron su mejor repertorio. Cuando eso pasa, suena
una música exquisita que encandila al mundo. Uruguay intentó interrumpir la
sinfonía de estos tres maestros. Les puso la zancadilla, les agarró. Todo tipo
de trabas con tal de frenarles, pero nada pudo evitar la lección magistral que
mostraron en el país de la samba.
Xavi sacó su amplio repertorio de
pases cortos. Parece fácil, pero siempre sabe dónde tiene que ponerla antes de
recibir. Cesc Fàbregas le ayudó en la creación. En corto, en largo y pisando el
área. A parte de desarbolar a la zaga con pases a la espalda de la defensa,
rozó el gol en más de una ocasión. La más clara, un disparo desde la frontal
que se topó con el poste.
Andrés Iniesta, mayúsculo. Para
enmarcar. Cuenta con las cualidades de sus dos compañeros de orquesta y,
además, añade un amplio repertorio de regates. Así volvió loca a la retaguardia
del vigente campeón de la Copa América. Mención especial en una jugada en la
que se zafa de dos defensores, encuentra el espacio y dispara cerca del segundo
palo. Si llega a entrar, estaríamos ante uno de los goles de la Confecup.
Iniesta fue elegido MVP. Partidazo el suyo, exhibición de talento en estado puro.
Xavi, Cesc e Iniesta conectaron y
España lo notó sobremanera. Ambos sentaron los pilares en una primera parte
primorosa, de las mejores de la era Del Bosque, si no la mejor. En la segunda
mitad, faltó rematar la faena para no terminar sufriendo tras el golazo de Luis
Suárez. De todos modos, mientras los tres directores sigan deleitando de esta
manera, España puede soñar con el único título que le falta. Anoche se completó
con éxito la primera actuación.
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