Hoy viernes se abre la vigésimo octava jornada con un derby gallego dramático. Deportivo y Celta se miden en Riazor con la necesidad imperiosa de ganar para eludir el descenso, zona que ambos ocupan. El Deportivo (colista, con 17 puntos) y el Celta (penúltimo con 23 puntos) están a nueve puntos y a tres, respectivamente, de la salvación. El que gane verá un atisbo de esperanza a costa de dejar tocado a su vecino.
Peor llega el Dépor. Hundido en
la clasificación, lleva dos meses sin ganar y necesita un milagro si quiere
seguir en Primera. Para tener fe requiere de un estímulo y cuál mejor que
doblegar a su principal enemigo. De ser así, se quedaría a tres puntos del
Celta. Este llega no tan agobiado. Viene de caer (1-2) ante el Real Madrid
pero, pese a la derrota, salió reforzado a raíz de la gran imagen exhibida. Este
buen hacer es lo que el conjunto celtiña espera trasladar en el derby para
profanar Riazor y dejar al Dépor sin esperanza.
Iago Aspas y Riki, las esperanzas de Celta y Deportivo
El mejor activo vigués tiene
nombre y apellidos: Iago Aspas. El de Moaña es una de las sensaciones
de la Liga. Calidad, velocidad y, ante todo, olfato de gol. Lleva 10 goles en
Liga, cantidad que tiene en mente aumentar con tal de sellar la salvación. Los
mismos tantos que Aspas lleva Riki.
El ariete se erige en el
futbolista más en forma del Deportivo y es la principal baza para que los tres
puntos se queden en casa. Ambos delanteros tendrán un gran peso para desnivelar
la balanza a un lado u otro, pero necesitarán el apoyo de sus compañeros. Los
Pizzi, Valerón, Aranzubia, Augusto Fernández, Javi Varas y Krohn-Dehli, también,
tienen mucho que decir al respecto.
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